Deshielo masivo: Una nueva aplicación nuclear para predecir el futuro de los glaciares. Joanne Burge. Difunde Cuerpo Socorro Argentino “Tcnl D José María Rojas Argerich”
Los
glaciares de Suiza perdieron más del 6 % de su volumen en 2022, el peor año
registrado. (Fotografía: Laboratorio de Spiez)
Los
glaciares llevan perdiendo masa desde la década de 1970 en todo el mundo. El
calentamiento global ha desequilibrado la proporción de nieve fresca y hielo
derretido. Estas grandes estructuras de hielo se están derritiendo,
debilitando, colapsando y desapareciendo en todo el mundo a un ritmo nunca
antes visto. Las consecuencias de estos fenómenos son inundaciones, sequías,
suministros de agua amenazados y economías debilitadas. Todo esto contribuye a
los efectos catastróficos del cambio climático. Hay tantas vidas que dependen
de los glaciares para obtener agua potable, para la agricultura, la energía
hidroeléctrica y el turismo que resulta fundamental prever y planificar con
precisión lo que les ocurrirá en el futuro.
Suiza
depende de sus glaciares, pero estos también se están derritiendo a gran
velocidad. Según la Academia Suiza de Ciencias, los glaciares del país
perdieron más del 6 % de su volumen en 2022, el peor año registrado. Los
investigadores afirman que el glaciar Aletsch, el mayor de Suiza, podría perder
la mitad de su volumen de hielo para finales de siglo.
Tradicionalmente, los glaciólogos rastrean el movimiento de los
glaciares utilizando marcadores como varillas, fotografías y pinturas
históricas, para comparar los cambios del hielo a lo largo del tiempo. Los
marcadores indirectos, como los aviones estrellados, también pueden indicar el
movimiento de los glaciares. Ahora existe otro método más preciso que puede
ayudar a los glaciólogos a modelizar el comportamiento de los glaciares con
mayor exactitud y, a su vez, predecir su futuro. Esto puede ayudar a los
responsables de la toma de decisiones a planificar en función del retroceso o
la desaparición total de los glaciares.
Los ensayos que realizamos con el material de referencia del OIEA nos permitieron confirmar nuestra capacidad para analizar concentraciones increíblemente bajas de radionucleidos en el agua — una millonésima de millonésima de millonésima de gramo por kilogramo —, algo bastante difícil de conseguir.
A unos
40 kilómetros al sur de la capital del país, en Berna, el Laboratorio de Spiez
ha desarrollado una técnica nuclear basada en la huella registrada en el hielo
durante los ensayos de armas nucleares realizados en los decenios de 1950 y
1960. Estos ensayos de armas nucleares generaron y emitieron a la atmósfera
radionucleidos artificiales que quedaron depositados en las capas superficiales
de los glaciares de todo el mundo. Dado que se conocen las fechas de estos
ensayos de armas nucleares, a través de la identificación de las
concentraciones máximas de estos radionucleidos, y de los patrones de
dispersión de radionucleidos debidos al flujo de hielo, es posible definir la
cronología de las capas de hielo.
“Hemos utilizado una técnica ya existente para la medición de
radionucleidos en suelos y otros materiales sólidos y por primera vez la hemos
aplicado al agua, el hielo y la nieve”, explica Stefan Röllin, investigador de
la División de Química Nuclear del Laboratorio de Spiez.
Detección de radionucleidos en el hielo
En 2019
y 2020, expertos del Laboratorio de Spiez y miembros de las Fuerzas Armadas
suizas escalaron los glaciares Aletsch y Gauli, en el escarpado terreno de los
Alpes berneses, para recopilar datos isotópicos de incalculable valor sobre sus
flujos de hielo. Extrajeron unas 200 muestras de hielo superficial de cada
glaciar, cada una de las cuales pesaba hasta un kilogramo, cantidad suficiente
para detectar los bajos niveles de radionucleidos. A continuación fundieron las
muestras y aplicaron métodos radioquímicos para extraer y purificar isótopos
del uranio y el plutonio, que analizaron con un instrumento de alta
sensibilidad llamado espectrómetro de masas multicolector con plasma acoplado
por inducción, o MC-ICP-MS.
Los
investigadores también aplicaron otras técnicas nucleares que permiten detectar
la presencia de radionucleidos de ensayos de armas nucleares en muestras
ambientales, como la espectrometría gamma de alta resolución, que detectó la
presencia de cesio, y el recuento por centelleo líquido, que detectó la
presencia de tritio.
“Estos
datos pueden utilizarse para perfeccionar y afinar los modelos de flujo
glaciar, hacerse una mejor idea de la velocidad a la que se derrite el glaciar,
predecir su futuro y calibrar los modelos de flujo de hielo para lograr una
mayor precisión”, afirma el Sr. Röllin. Los métodos desarrollados por el
Laboratorio de Spiez se validaron en función de muestras de referencia del OIEA
de agua del mar de Irlanda para garantizar su precisión. Los científicos
utilizan muestras de referencia para comprobar que sus métodos de ensayo
arrojan resultados exactos. El OIEA pone estas muestras a disposición de
laboratorios de todo el mundo.
“Los
ensayos que realizamos con el material de referencia del OIEA nos permitieron
confirmar nuestra capacidad para analizar concentraciones increíblemente bajas
de radionucleidos en el agua — una millonésima de millonésima de millonésima de
gramo por kilogramo —, algo bastante difícil de conseguir”, afirma el Sr.
Röllin.
El
Laboratorio de Spiez presentó sus investigaciones en la Conferencia
Internacional sobre Radiactividad Ambiental (ENVIRA 2021), celebrada en
Grecia en 2021, y en el Congreso Internacional de Metrología de Radionucleidos
- Técnicas de Medición de la Radiactividad de Baja Actividad (ICRM-LLRMT),
celebrado en Italia en 2022.
El
Laboratorio de Spiez es centro colaborador del OIEA desde 2016 y, en 2020, se
renovó su designación hasta 2025, con el fin de apoyar las actividades
programáticas del OIEA. Como centro colaborador del OIEA, imparte formación a
becarios y acoge cursos de capacitación y a visitantes científicos. También
participa en misiones de expertos a los Estados Miembros del OIEA para promover
la aplicación práctica de esta técnica en otros lugares donde los glaciares son
importantes para lograr una política medioambiental y una economía sostenibles.
“El Laboratorio de Spiez es un centro de excelencia que cuenta
con un historial de extraordinaria competencia analítica y con amplia
experiencia en muestreo y mediciones sobre el terreno de todo tipo de
contaminantes, en particular radionucleidos”, declara Iolanda Osvath, Jefa del
Laboratorio de Radiometría del OIEA. “Proporciona un enorme apoyo a la
capacitación y el desarrollo metodológico de la red de Laboratorios Analíticos
para la Medición de la Radiactividad Ambiental (ALMERA) del OIEA. Sus
actividades de investigación y desarrollo abordan una amplia gama de problemas
ambientales con enfoques innovadores, como demuestra su novedoso trabajo sobre
los glaciares”.
DIFUNDE
Cte Pr Dr D CARLOS GUSTAVO LAVADO ROQUÉ-LASCANO PhD
"PARTICIPO EN LA GUERRA DE LA DE LA SEPTIMA GENERACIÓN CONTRA AMENAZAS ASIMÉTRICAS".en la elaboración de NORMAS DE PROTECCIÓN FÍSICA DE INSTALACIONES NUCLEARES junto al OIEA, con medidas para PREVENIR, INTERCEPTAR y RESPONDER a usos ilícitos de materiales nucleares y fuentes radiactivas. Antes de los ataques terroristas del 11 septiembre de 2001
DESCENDIENTE DE GUERREROS Y PRÓCERES DE LA INDEPENDENCIA ARGENTINA Y SUDAMERICANA.
MIEMBRO DE LA LEGIÓN DE PATRICIOS VOLUNTARIOS DE BUENOS AIRES
Especialista en EMERGENCIAS TOXICOLÓGICAS MASIVAS - CITEDEF - CONICET
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